Leyendas del Perú 2g: personas piratas
Un pirata con un tesoro en una maleta -
escondida para siempre (Moquegua)
Departamento de Moquegua (sur del Perú).
de: El vengador espíritu pirata (Moquegua);
http://leyendas-peru.blogspot.pe/2011/08/el-vengador-espiritu-pirata-moquegua.html
Narran los pescadores con más experiencia del varadero
artesanal de Ilo, que Puerto Inglés, playa ubicada al sur
de la ciudad, fue como una especie de fuerte y
desembarcadero pirata.
Los piratas desembarcaban aquellos tesoros que sustraían
de los navíos de la corona española en una fortaleza
peñosa construida por la propia naturaleza, la cual
hallamos en el cerro de peñas que se encuentra ubicado
frente a la playa.
Como era costumbre, después de haber atacado un navío
real, la tripulación pirata quedaba maravillada de tanta
riqueza , todos los objetos eran de oro y decorados con
rubíes.
Al día siguiente de cada robo, el capitán de la
embarcación declaraba los tesoros y a la vez los demás
daban fe de protegerlo de cualquier amenaza inclusive
sacrificando sus vidas.
Una noche Gulibert uno de los piratas, presionado por la
codicia de la mujer que amaba, sustrajo un cofre. Al ser
descubierto por sus compañeros, huyó despavorido rumbo al
cerro de peñas con la finalidad de esconderlo, y así lo
hizo.
No había pasado mucho tiempo y Gulibert fue detenido por
el capitán, quien ordenó castigarlo por la traición, lo
cual era castigado con la muerte, y así lo hicieron.
Degollaron a Gulibert y condenaron su espíritu a la
protección infinita de los tesoros.
Transcurridos los años, nadie se atrevía a buscar el baúl.
Gulibert recorre las inmediaciones del cerro de peñas,
decapitado, debido al castigo que le dieron.
Se dice que su espíritu seguirá penando hasta reunir la
cantidad de vidas que tenía la tripulación pirata a la que
pertenecía. También dicen que aquel que encuentre o trate
de encontrar el baúl del tesoro será maldecido como
Gulibert.
Piratas castigados en lobos marinos - la playa
Las Loberas (Moquegua)
Departamento de Moquegua (sur del Perú).
de: Playa Las Loberas (Moquegua);
http://leyendas-peru.blogspot.pe/2011/08/playa-las-loberas-moquegua.html
Había una vez en el puerto de Ilo una playa en la cual
vivían una señora y sus dos nietas. Un día la señora mando a
sus nietas a recoger leña, sin saber que por ese lugar se
encontraban merodeando piratas. Los piratas al ver a las
niñas fueron tras ellas, las golpearon y las ultrajaron.
Las niñas al regresar a su casa le contaron todo lo sucedido
a su abuela, quien enfurecida salió en busca de los
culpables. Al encontrar a los culpables, la mujer lanzó
grandes maldiciones contra ellos, y debido a esto se dice
que los piratas se convirtieron en lobos marinos.
Es por eso que a ese lugar se le conoce con el nombre de la
playa Las Loberas.
Piratas llevan esclavos negros a Moquegua - la
playa "Calienta Negros"
Departamento de Moquegua (sur del Perú).
de: Calienta negros (Moquegua);
http://leyendas-peru.blogspot.pe/2011/08/calienta-negros-moquegua.html
Graciela Vera contaba sobre la playa Calienta Negros la
siguiente leyenda:
La misteriosa playa de Calienta Negros está enclavada en un
paradisíaco lugar rodeada de silenciosos peñascos, ternos y
celosos guardianes de lo que allí sucedió. Esta enigmática y
seductora playa tiene el increíble sortilegio de atraer,
enamorar y despertar profunda curiosidad por sus raras
leyendas de acontecimientos ocurrido durante la Colonia. La
leyenda cuenta de cuando llegaron por mar raras e
impresionantes embarcaciones a vela, flameando tétricas
banderas negras y despertando el temor de la población. En
esos galeones viajaban temibles y sanguinarios piratas en su
afán de rapiña por haberse enterado de los fabulosos tesoros
en el Perú. Aquellos ocultaban sus naves en playas pequeñas
y tranquilas par asechar a los españoles portadores de sus
inmensas riquezas. Pero también llegaban con sus bodegas
llenas de esclavos traído desde el Congo.
Hombres y mujeres negros eran tratados como bestias de carga
y vendidos como tales. En la playa se les sometía a subasta
en donde se les cotizaba por su estatura, físico y
dentadura, adornado con grilletes que llevarían hasta el fin
de sus días.
Fondeados sus galeones, los diabólicos piratas en su
estratégico escondite procedían a desembarcas la triste y
lacerada mercancía humana en la playa , apartada tanto del
humilde pueblo y aprovechando de ese lugar para calentar o
reanimar bajo los reconfortantes rayos de sol a los
miserables negros, desventurada gente que llegaba después de
una penosa, larga y sacrificada travesía de largos meses por
el mar sin poder siquiera caminar ni estirar su cuerpo,
medios moribundos, desnutridos y con múltiples enfermedades.
Esta famosa e histórica playa que los piratas utilizaban
para calentar a los negros por espacio de algunos días y
alimentarlos con mariscos y pescado antes de su
comercialización se conoce hasta nuestros días como Caleta
Negros (Calienta Negros).
Allí también ocurrió otro hecho: “Dicen que una hermosa y
bien formada negrita era requerida y asediada por un robusto
y barbado pirata inglés, y cuentan que en una tranquila y
oscura noche de verano allá junto al roquerío el pirata
pretendió hacerla su mujer. La negrita angustiada se
defendió como podía y desesperada, ya no sabía que hacer y
antes de perder su honor en manos de ese bárbaro pirata,
cogió una daga del cinto del pirata… y en vista que los
ruegos no el importaban ni las lágrimas conmovían a aquel
hombre cruel, ella perdió la razón, se hundió la daga en el
pecho y se partió el corazón.”
Otra versión no habla de piratas si no de comerciantes
ingleses quienes desembarcaba por Puerto Inglés y utilizaban
Calienta Negros para los fines que se han comentado en
líneas anterores. Es de allí donde vendría el nombre de
Calienta Negros: el lugar donde se calentaba a los negros
vendidos como esclavos, o la caleta de los negros, en donde
se les comerciaba para introducirlos en los valles de Sama,
Moquegua, Tacna, Arica y Tarapacá.